Ingenious. Pensar no hace daño. (SHAREWARE)
Primero tengo que decir que este no es un juego que merezca ser comprado, es demasiado simple y limitado como para que merezca la pena su adquisición, pero por otro lado es un juego de tablero genial, ideal para una esporádica partida a dobles o contra el ordenador.
La forma de juego es sencilla pero cada jugada nos obligará a pensar detenidamente nuestra elección. Tenemos dos jugadores que se van alternando en el juego, un tablero hexagonal, en cada esquina del hexágono hay una ficha única de cada color y finalmente en la parte inferior tenemos nuestras fichas dobles (con dos colores) listas para colocar, con esos sencillos elementos se desarrolla la partida en la que debemos colocar las fichas teniendo en cuenta que se nos puntua por colocar los colores de forma adyacente (en la esquina inferior izquierda tenemos un contador múltiple donde se nos indica como va nuestra puntuación de cada color), en la suma de puntos se tienen en cuenta tanto la cantidad de fichas del mismo color que rodean a la ficha colocada como su longitud.
En este juego existen dos reglas la mar de curiosas, la primera es que pierde el que tenga menos de cualquier color, es decir podemos haber hecho combos de todos los colores hasta hartarnos que si nos queda un color más bajo que el más bajo del contrario perderemos, la segunda regla es que cuando alcanzamos 18 puntos en cualquier color tenemos una tirada extra. De esta forma las partidas se desarrollan con una doble faceta de buscar alcanzar diez puntos en los colores con más puntos sin descuidar los colores de los que menos tengamos, evitando a la vez que el rival haga muchos puntos cerrándole los colores que más necesite.
Es un juego muy limitado porque se queda algo corto, no hay diferentes tableros, ni un modo historia ni nada de nada. Pero por otra parte es muy entretenido y divertido jugando a dobles, e incluso contra el ordenador en el nivel de dificultad más alto resulta un reto más que interesante.
Descargar
Requisitos mínimos:
Windows 2000, Windows XP, Windows Me, Windows Vista
256 MB RAM
DirectX 8.0
Pentium 750
Video 16MB
La forma de juego es sencilla pero cada jugada nos obligará a pensar detenidamente nuestra elección. Tenemos dos jugadores que se van alternando en el juego, un tablero hexagonal, en cada esquina del hexágono hay una ficha única de cada color y finalmente en la parte inferior tenemos nuestras fichas dobles (con dos colores) listas para colocar, con esos sencillos elementos se desarrolla la partida en la que debemos colocar las fichas teniendo en cuenta que se nos puntua por colocar los colores de forma adyacente (en la esquina inferior izquierda tenemos un contador múltiple donde se nos indica como va nuestra puntuación de cada color), en la suma de puntos se tienen en cuenta tanto la cantidad de fichas del mismo color que rodean a la ficha colocada como su longitud.
En este juego existen dos reglas la mar de curiosas, la primera es que pierde el que tenga menos de cualquier color, es decir podemos haber hecho combos de todos los colores hasta hartarnos que si nos queda un color más bajo que el más bajo del contrario perderemos, la segunda regla es que cuando alcanzamos 18 puntos en cualquier color tenemos una tirada extra. De esta forma las partidas se desarrollan con una doble faceta de buscar alcanzar diez puntos en los colores con más puntos sin descuidar los colores de los que menos tengamos, evitando a la vez que el rival haga muchos puntos cerrándole los colores que más necesite.
Es un juego muy limitado porque se queda algo corto, no hay diferentes tableros, ni un modo historia ni nada de nada. Pero por otra parte es muy entretenido y divertido jugando a dobles, e incluso contra el ordenador en el nivel de dificultad más alto resulta un reto más que interesante.
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Requisitos mínimos:
Windows 2000, Windows XP, Windows Me, Windows Vista
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